Camara de vigilancia

lunes, 25 de junio de 2012


Hola,
Este es nuestro Blogger sobre la ética profesional, con el pretendemos darles conocer conceptos básicos y sobre todo mostrarles nuestro punto de vista en cada aspecto que ello conlleva.

Esperamos que lo encuentren muy entretenido y productivo.

Introducción

"La palabra ética proviene del griego ethikos (“carácter”). Se trata del estudio de la moral y del accionar humano para promover los comportamientos deseables. Una sentencia ética supone la elaboración de un juicio moral y una norma que señala cómo deberían actuar los integrantes de una sociedad.

La ética profesional pretende regular las actividades que se realizan en el marco de una profesión. En este sentido, se trata de una disciplina que está incluida dentro de la ética aplicada ya que hace referencia a una parte específica de la realidad."





Mapa Conceptual

En el siguiente mapa, podran ver en un mapa conceptual, lo que Ética es.



Ensayo de Procastinación


Ensayo
La procrastinacion.

La palabra procrastinación, según la real academia significa aplazar. En psicología describe la conducta de aplazar, postergar, posponer- de manera sistemática- aquellas actividades, tareas o compromisos para hacer otras actividades más triviales y apetecibles.
En la actualidad, la conducta de procrastinar está instalada en muchas personas, que sin saberlo, se ven afectadas por la conducta de procrastinar. Muchos estudiantes universitarios, trabajadores de todas las edades, profesionales y no profesionales la sufren. Por eso, la psicología, se encuentra en este momento tratando de descifrar porque hacemos lo que hacemos cuando se trata de procrastinar.

Según los académicos, la procrastinación tiene lugar, no cuando decides dejar algo para mañana, sino cuando lo haces a sabiendas de que será perjudicial y va contra ti mismo, Ahí está el punto de irracionalidad. Procrastinar incide negativamente en nuestra moral, aumenta nuestro estrés y, en definitiva, no nos hace más felices.

La mayor parte de la gente se identifica como procrastinador, cuando logra enterarse de lo que esta palabra significa en ciertos aspectos y en ciertos momentos de su vida. El nivel de los estudios se ha encontrado que alrededor del 20% de adultos en la población general son procrastinadores crónicos, y es aun mayor la cantidad en la escuela y en las universidades 75 – 95%. Esto significa que la procrastinación es en realidad una forma de comportamiento típica o usual, la cual todos en cierto momento practicamos.
Pero hay una diferencia entre la procrastinación general que todos en algún momento hemos practicado y la procrastinación problemática o crónica. La segunda no deja que una persona desarrolle todo su potencial y tampoco permite que tenga un bienestar en la vida. Crea problemas en distintas esferas o aspectos como en trabajo. En pocas palabras, afecta el desarrollo personal, en muchos niveles.
Entonces, la procrastinación se podría definir de forma más analítica, como tomar una decisión sin una razón válida, para postergar o no completar una tarea o actividad a la que uno se ha comprometido, para en cambio, hacer algo de menor importancia.

 En opinión, la procrastinación es un gran enemigo de la productividad y las personas que tienen este comportamiento de forma habitual no aprovechan en absoluto su potencial. Y me temo que soy uno de ellos.


Aquí podrán ver un mapa mental de donde se muestra el perfil profesional del administrador de empresas de hoy.




Los siguientes esquemas darán claridad entre la ética y la moral, al igual que sus diferencias.


Composición literaria sobre ética.



En un país donde el deterioro moral y el delito parecen crecer ya casi sin sorprender a nadie, instituir un sentimiento para recordar la necesidad de recobrar y fortalecer los valores fundamentales que rigen la convivencia humana, no solo es urgente sino que resulta la mínima e impostergable expresión de esfuerzo en ese empeño.

El estímulo de una actitud positiva y consciente hacia la honestidad y el respeto, hacia la solidaridad y el trabajo, hacia la responsabilidad y la integridad ciudadana, entre muchos otros valores, debe ser lucha diaria, y no de un grupo sino de todos los grupos, no de un hombre o de una mujer sino de todos los hombres y mujeres para despertar y hacer actuar la conciencia, que es donde palpita la fuerza de la decisión permanente para escoger entre el bien y el mal; donde radica ese gran centro de poder de la conducta humana, inviolable sede de la ética, baluarte de la moral.

Estudios de responsables organizaciones internacionales han concluido que la diferencia entre países ricos y pobres se debe, básicamente, no a su riqueza natural ni a las ventajas de orden geográfico-político sino a la educación y actitud de la gente, a la vigencia y beligerancia de sus valores, capaces de engendrar confianza, respeto, deseo de superación, amor por el trabajo, sentido de dignidad, sustracción del sometimiento paternalista, respeto a los derechos del ciudadano, elección cuidadosa y responsable de quienes deben manejar la cosa pública con pulcritud y capacidad.

Una cosa es el delito tipificado por la ley, que debe ser investigado de manera efectiva y prolija, y luego juzgado con prontitud, equidad y transparencia, y otra es la falta de ética, analizada y ponderada en el íntimo y sagrado tribunal de la conciencia, en relación a los daños morales infligidos y luego reparados por el ofensor o evaluados y sancionados moralmente por sus semejantes.

De allí que la permisividad desde el hogar y luego de la sociedad y la corrupción de la autoridad cambien gradual y consistentemente el sentido de responsabilidad por el respeto y la justicia. Y al final, el mayor perjuicio que causa el silencio y la inclinación de los ciudadanos ante la falta de ética y la transgresión de la ley.

Lo peor de las cosas malas, sentenciaba Gandhi, es el silencio de los hombres buenos. Estas son los que trata de exaltar, a través de una amplia gama de actividades, tareas e inquietudes en búsqueda incesante, a todos los niveles de todos los sectores, de una cultura ética y cívica, caracterizada por el sentido de cohesión social y de equidad, de justicia y libertad, por parte de todos y cada uno de nosotros.

Son muchas las personas, las organizaciones, los grupos que inspirados en este noble anhelo por la superación espiritual del individuo desarrollan –aún a costa de sacrificios, incomprensiones y peligros– una tarea que va mucho más allá del desprendimiento, pero que debe ser mejor estructurada y coordinada para evitar la duplicación y el recurso malgastado e, inclusive, la desorientación y el celo, no ausentes de toda actividad humana.